Memorias prematuras (Rafael Gumucio)

9788439720171Memorias prematuras (1999)

Rafael Gumucio (1970)

Debolsillo RHM

ISBN 978-956-325-8

173 páginas

 

Memorias prematuras es un libro que fue publicado originalmente en 1997 y reeditado por RHM en el año 2010. Es una construcción que transita entre la novela y la crónica personal, un relato en primera persona de la vida del escritor, donde todo pasa por el cedazo de su propia subjetividad, inundándose en ella, no quedando nada más que esta especie de autoficción desbocada a través de la cual vamos conociendo al autor, al Rafael Gumucio niño exiliado en Francia, al Gumucio colegial temeroso, al Gumucio universitario que escapa del Servicio militar obligatorio y al Gumucio recién estrenado profesor de castellano, haciendo su práctica.

Quiero correr sobre los techos y las panderetas y escribir eso que sé que no podré traducir en palabras, eso que está tan vivo que al escribirlo muere. (pág 162)

No es un libro que se asiente en los hechos que Gumucio nos cuenta, ni en el cúmulo de anécdotas que podrían resultar más o menos amenas, sino más bien en los miedos de su infancia, relatados desde un tono que sigue dudando, que pareciera errar cada vez, de alguien que jamás hubiese crecido y que no ve los hechos con la distancia fría que impone la adultez, sino que sigue dueño de los mismos miedos y escalofríos de su infancia, o que al menos es capaz de replicar la sensación latente de haber sido víctima de ellos.

Miguel fuma, Miguel es casi un adulto y ya es un fracaso. Yo soy un virgen. Soy un monstruo sin importancia. Como hace tres años, como siempre, no tenemos nada de que hablar. No me queda otra que hablar sin parar. (pág. 128)

Es en ello donde radica, probablemente, el mayor valor de este libro: en la construcción que se materializa desde el lenguaje, donde es este y no la anécdota la que trasmite la inseguridad infantil, el tedio y miedo ante todo, esa impostura ante la vida que sufre el autor. No obstante, es un libro que también podría leerse como un anecdotario familiar, como el conjunto de experiencias de los ascendientes directos del autor, sus pequeñas historias, el de su apellido ligado a la historia de Chile que se escribe con mayúsculas, el que, como familia que pretende ostentar cierto lugar social, saca brillo y hace relucir en todo cuanto es posible. Pero en el autor no existe crueldad con su familia, pareciera ser que toda la agota en sí mismo. Es por ello que aun cuando también se refiere a otros, jamás caen bajo el pelambre, bajo el comidillo, sino que con su mirada, con su lenguaje, también logra reconstruir los vínculos afectivos entre unos y otros.

Se trata, en suma, de un muy buen libro, del que se agradece haya sido reeditado (aun cuando ya vayan varios años de aquello), y que en una época muy temprana se circunscribe entre aquellos relatos que son una forma de narrar la historia personal, la infancia particular del escritor, pero en este caso, con una estridencia caótica y desenvuelta que produce gracia y conmiseración ante el niño al cual nos enfrentamos.

G. Soto A.

Cofundador y administrador de Loqueleímos.com. Autor de "Liquidar al adversario" (2019, Libros de Mentira).

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