El Proceso (Franz Kafka)

Der Prozess (1925)
Franz Kafka (3.07.1883/3.06.1924)
Nórdica Libros
ISBN: 9788493621360
222 páginas
Precio Referencial: € 29,50 EUR.
 «Alguien debía de haber calumniado a Josef K., porque, sin haber hecho nada malo, fue detenido una mañana».
El Proceso de Kafka… Reprimo una primera intención de poner punto final a esta reseña justo aquí. Qué más se puede decir de una novela como ésta, que ya ha sido tan extensamente estudiada, y seguramente leída por muchos de ustedes. Qué se puede decir sobre aquello que difícilmente se puede interpretar, sobre lo que no ha sido realmente dilucidado. Kafka es, por sí mismo, un autor profusamente comentado y leído. Una especie de long seller. No deseo explayarme en explicar su figura. Tiene bastante de enigmático y sin duda, si se dan un par de vueltas por la red, podrán encontrar biografías bastante completas de él (de hecho, si desean realmente internarse en la vida y mundo kafkiano recomiendo como pie de partida el libro biográfico Kafka, literatura y pasión escrito por Nicholas Murray). Como sea, para los que aún no sepan de qué trata esta novela, que fue dejada inconclusa por el autor (como otras tantas  que jamás terminó, cosa que hace aún más imprecisa cualquier labor de interpretación), le dedicaré un par de líneas al argumento.
 
Un día Josef K. es interrumpido en su rutina diaria. Al despertar se le comunica que se encuentra detenido, que en su contra se está llevando un importante proceso y que debería comenzar a preparar su defensa. Está detenido, pero su detención se desarrolla en libertad. Se le comunica la existencia de este proceso, pero jamás llega a enterarse de qué se le acusa. Esto es bastante típico del tono y ambiente kafkiano: la existencia de un protagonista sumergido hasta la asfixia en un medio que desconoce, que no consigue interpretar pero que lo va determinando. El hombre frente al medio, impotente hasta el hartazgo. Toda la historia se va a desarrollando y avanzando lentamente, en conformidad a qué tan inmerso está el protagonista en este proceso que se está sustanciando en su contra, en cuánto y cómo él va sufriendo y sintiendo los efectos. Luego tenemos un par de capítulos sueltos y nada de hilados, que en general se suministran aparte (al final de la correlación de capítulos terminados) además de un final escrito como a la rápida, que da clara cuenta cómo esta obra no ha sido totalmente pulida. ¿De qué se le acusa? Jamás lo sabemos. Pero cómo negarlo (idea que da vueltas en la obra), un hombre siempre puede ser culpable de algo y aquello el protagonista lo sabe.
 
 
Qué significa este proceso. ¿Es realmente una crítica contra los sistemas punitivos estatales? . Con respecto a esto, no olvidemos que Kafka era abogado de profesión. A primera vista pareciera ser lo correcto pero, luego de una segunda lectura, aquella interpretación lineal resulta un poco simplona. Sí, claro que es válida, pero ¿es sólo eso?. En absoluto. Esta novela se mueve en muchos niveles interpretativos y que dependen incluso de lo que se pueda pensar sobre el propio autor. Muchos creyeron ver en las obras de Kafka alegorías religiosas. El hombre sumergido ante entidades superiores. El hombre judío. El hombre frente al mundo. Me parece, en lo personal, que el proceso –en especifico- es la representación de una entidad irreconocible, no ficticia sino que real aunque inmaterial, en la que supervive el hombre moderno. ¿Qué es el proceso? El proceso es la vida misma, según esta interpretación personal, la vida con todo aquello que nos agobia, con esta sensación de inmersión y asfixia. No quiero exponer un punto de vista negativo sobre la vida sino que estoy interpretando al trasluz de esta obra. Kafka vivió esa vida como mirada desde un ático, un tanto ajena a la vida misma, pero sometida a las presiones del ser. ¿Es eso el proceso? A mí al menos me lo parece. Consideren que Kafka no parecía escribir para un público (salvo muy pequeños círculos no tuvo realmente ningún reconocimiento literario en vida), él lo hacía como un desahogo de sí mismo, de su propia existencia. Ronda a cada instante aquel sentimiento de culpa que es transversal en su obra. Kafka era un hombre doliente, o al menos así nos ha sido presentado (y más actualmente desmitificado en parte esta característica). Enigmático, y por lo mismo un abismo.
Lo que leímos

Publicado por el equipo de Loqueleímos.com

Tags from the story
,
Join the Conversation

3 Comments

  1. says: Anonymous

    me parece un obra literaria bastante compleja puesto que no concuerdan algunos capítulos..<br />es bastante interesante aunque se tiene que analizar mucho para entenderlo

Leave a comment
Leave a comment

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *